El Parque Nacional Conguillío es un lugar para disfrutar, pero también para aprender sobre la riqueza biológica de la reserva de 60.832 hectáreas. Entre sus mayores atractivos destaca el volcán Llaima, sus lagunas de formación volcánica y sus bosques de araucarias milenarias, lo que le dan a este parque nacional el nombre de “paraguas”. Incluso, ¡hay bosques de este árbol nativo que tienen 1.200 años de antigüedad!
A través de los programas de educación e interpretación ambiental que CONAF imparte de manera gratuita, se puede recorrer los senderos del Parque Nacional Conguillío en familia para aprender sobre la naturaleza, su flora y fauna.
El Conguillío es un parque que se puede visitar en todas las estaciones del año, pero es durante el invierno en que el centro de ski Las Araucarias cobra la atención de los visitantes y amantes del esquí. Este refugio cuenta con dos andariveles de arrastre, ofrece clases, arriendo de equipo, hospedaje y cafetería.
¿Aficionado al senderismo? En el sector de excursión Los Carpinteros, de 5 kilómetros de extensión, te internaras por un bosque de araucarias, lengas y coigües, el que permite acceder a la laguna Captrén. ¡Aquí se puede observar una araucaria con un tronco de 2 metros de diámetro!
El sendero de excursión Sierra Nevada, de 10 kilómetros de extensión, ofrece vistas del lago Conguillío, al volcán Llaima y de algunos glaciares. Entre los senderos educativos del parque, destaca Las Araucarias y sus 12 estaciones con paneles explicativos.
También se puede hacer pesca recreativa en el lago Conguillío y en la laguna Verde, y seguir los senderos de trekking del volcán Llaima. A sus pies se encuentran algunas ciudades que puedes visitar como Curacautín, Cherquenco y Melipeuco.